Me acaban de diagnosticar cirrosis hepática, pero ¿qué es?
- Dra. Ome Pérez

- 10 sept
- 2 Min. de lectura
La cirrosis hepática es una enfermedad crónica del hígado que ocurre cuando este órgano sufre daño progresivo y forma tejido cicatricial (fibrosis). Este tejido reemplaza las células sanas del hígado, afectando su capacidad para funcionar correctamente.
El hígado es vital para muchas funciones del cuerpo, como:
- Procesar nutrientes y medicamentos
- Eliminar toxinas
- Producir proteínas importantes para la sangre
Cuando el hígado sufre daño por mucho tiempo, pierde su capacidad de regenerarse y se vuelve rígido (cirrosis), lo que puede causar complicaciones graves.

¿Qué me pudo haber causado cirrosis hepática?
Las causas más comunes de cirrosis incluyen:
- Consumo excesivo de alcohol durante años y en cantidades abundantes
- Hepatitis virales crónicas, especialmente hepatitis B y C
-Enfermedades autoinmunes primarias del hígado como hepatitis autoinmune o colangitis biliar primaria.
- Hígado graso no alcohólico, ahora llamado metabólico, relacionado con el sobrepeso y obesidad, diabetes y otras enfermedades metabólicas
- Enfermedades hereditarias como la hemocromatosis (acumulación de hierro) o la enfermedad de Wilson (acumulación de cobre)
- Uso prolongado de ciertos medicamentos hepatotóxicos
¿Qué síntomas puedo tener?
En etapas tempranas, la cirrosis puede no causar síntomas. A medida que avanza, pueden aparecer:
- Cansancio extremo
- Pérdida de apetito y peso
- Ictericia (color amarillo en piel y ojos)
- Hinchazón abdominal por acumulación de líquido (ascitis)
- Sangrado fácil o moretones
- Confusión o somnolencia (encefalopatía hepática)
¿Cómo puedo saber si tengo cirrosis?
El diagnóstico se realiza mediante:
-Historia clínica completa y exploración por un profesionales de la salud
- Análisis de sangre para evaluar la función hepática
- Ultrasonido abdominal
-Elastografía hepática o fibroscan para medir la dureza del hígado
- En algunos casos, una biopsia hepática para confirmar el grado de daño
Tratamiento personalizado en la cirrosis hepática
Aunque existen diversas estrategias para controlar sus síntomas y complicaciones, hasta el momento no hay ningún medicamento capaz de revertir el daño hepático ya establecido.
Por esta razón, el tratamiento debe ser individualizado, es decir, adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. Esto implica considerar:
- La causa de la cirrosis
- El estado clínico del paciente (si la cirrosis está compensada o descompensada)
- Las complicaciones presentes, como ascitis, encefalopatía hepática o várices esofágicas
- Las comorbilidades (otras enfermedades que puedan influir en el tratamiento)
Lo que aún no existe
A pesar de los avances médicos, no hay fármacos que puedan revertir la fibrosis hepática avanzada ni restaurar completamente la función del hígado dañado. La única opción curativa en etapas avanzadas es el trasplante de hígado, reservado para casos graves y cuidadosamente seleccionados.
-Tapper EB, Parikh ND. Diagnosis and Management of Cirrhosis and Its Complications: A Review. JAMA. 2023 May 9;329(18):1589-1602. doi: 10.1001/jama.2023.5997. PMID: 37159031; PMCID: PMC10843851.






Comentarios